martes, 18 de diciembre de 2012


Daniel Landgrave: Los pobres pusieron sabor a tu busqueda.

          Un joven de buen nivel socio economico, de un dia para otro decide ensayar una ruta no convencional para su vida. El seminario de Hermosillo era un espacio de busqueda. El ambiente fraterno, con la herencia de “La parcela” dejada por Don Juan Navarrete y en la epoca mas creativa del post Vat II, algo se respira: Los jovenes seminaristas de ese entonces sospechan que hay una Buena noticia por descubrir y no pueden creer que esa Buena noticia esta escondida en su propia vida y en esa misma vida se pueda hacer carne.

Daniel encabeza esa busqueda, es entusiasta y tiene espiritu para animar a otros.

Al rededor de los 70’s, los estudiantes de teologia, entre ellos Daniel, estan abiertos a la reflexion teologica. El aula es una invitacion, saben que hay algo que vale la pena en el “saber teologico”, pero a la vez experimentan con desazon que lo que pasa en el salon no presenta desafios interesantes. Quienes recien entrabamos al seminario veiamos y oiamos que algo estaba pasando entre los mas grandes. Casi al terminar el ano nos enteramos de que un equipo coordinador de teologos planeaba no regresar al siguiente ano si no se implementaba un plan concreto para renovar y mejorar la planta de maestros. Aquel equipo esta dispuesto a cumplir y presionar si no habia respuesta.

El movimiento tuvo impacto. Don Carlos Quintero y el equipo del seminario deciden enviar estudiantes a Roma, para fortalecer el grupo de maestros. Un grupo de companeros abren el camino para estudiar en la Gregoriana y convivir con companeros de todo Mexico en el Colegio Mexicano. La primera estancia de Daniel en Roma, la seguimos varios con atencion: las cartas que escribe, especialmente a Nacho Valdez, son una nutrida bitacora de esa aventura de estudio y redimensionalizacion de la conciencia en una Roma, donde la Universidad Gregoriana es ya un laboratorio de globalizacion, por la rica diversidad de jovenes llegados de todo el mundo.

Con una licencia en Sagrada Escritura regresa para ensenar en el Seminario de Hermosillo. Para esa epoca los que habiamos visto con perplejidad las protestas de nuestros companeros telogos hacia 5 u 8 anos estabamos ya en teologia. Acogimos con entusiasmo al biblista recien llegado. Las jornadas biblicas con Daniel, tenian contenido y transmitian el saber de los ya legendarios maestros de la escritura como Luis Alonso Shockel… exploramos, conducidos por Daniel, horizontes nuevos para acercarse al antiguo testamento. Consiguio inspirar en nosotros una perspectiva critica de la biblia y una inquietud por dejar que la Palabra hiciera impacto en nuestras vidas.

Esa Palabra habia ya tocado su vida. Aun sin tener la experiencia de proceder de una familia pobre…algo encontro en Jesus y su evangelio que lo hizo trastocar sus valores y replantearse todo desde el mundo de los pobres.

No hay comentarios: